Sevilla y Valencia líderes, pero alternativas?
Arrancará la sexta jornada de Liga con un triple empate en lo alto de la clasificación, en el que ya tenemos a un habitual, el Barça, y dos soplos de aire nuevo, el Sevilla y el Valencia. Tras los tropezones del Real Madrid, y el empate del equipo culé en Málaga, sevillistas y valencianistas pueden presumir de liderato por lo menos unos días. Puede que este liderato sea anecdótico, y que no vuelva a repetirse a lo largo de la temporada, pero sí que es merecido.
Con una política de fichajes acertada, tanto con compras cómo con cesiones, chés y sevillistas han construido unas grandes plantillas. Los de Nuno, con un Alcácer en estado de gracia, y con un gran funcionamiento de los recién llegados cómo André Gomes, Rodrigo o el canterano Gayá, se han ganado a pulso el puesto que tienen en la clasificación. Además llega la confirmación de Parejo, que parece haberse hecho con los galones que le ha otorgado la capitanía del equipo, demostrando una madurez que hace que su juego y el del equipo adquieran un nivel superior. Por si fuera poco, al once inicial del Valencia, le sigue una gran segunda unidad, con los Feghouli, el aún lesionado Negredo, Zuculini, Orban, Carles Gil y el sancionado Rodrigo de Paul que aportan y aportarán al equipo mucho a lo largo de la temporada. Pero más allá de los nombres, que son importantes, lo que realmente es llamativo de este equipo es el sentido con el que lo hace todo. El equipo ché ataca con sentido, se defiende muy bien y te mata con y sin el balón. El Valencia es un rival incómodo, que puede poner en aprietos a cualquiera de los grandes, ya que tanto en Mestalla cómo fuera, se ha mostrado muy solvente hasta ahora. Sin competición europea, los de Nuno podrán centrarse en la Liga y pueden ser un equipo peligroso para los puestos de arriba. Es pronto para hacer predicciones, pero parece que en Valencia hay buenos mimbres para hacer una gran temporada.
El caso del Sevilla es parecido, ya que los de Nervión se han reforzado muy bien con Denis Suárez, Banega, Aleix Vidal, Deulofeu, Aspas y Mbia. Además, a pesar de la marcha de Rakitic, ha mantenido el núcleo duro que le permitió ganar la Europa League el año pasado. El Sevilla, al igual que el Valencia, tiene un once tipo que le ha permitido ponerse colíder de la competición, pero su segunda unidad no tiene nada que envidiar al once títular. En su banquillo hay jugadores de la talla de Reyes, Aspas, Deulofeu o Banega que están deseando gozar de más minutos, y que cuando los tienen los exprimen al máximo. Esto da un plus al equipo, ya que la competencia interna hace mejorar a todos, y además tiene a Bacca en racha, lo que hace del Sevilla un equipo muy peligroso. La diferencia con los valencianistas, es que tienen la "distracción" de la Europa League, esa competición que ha dado tantas alegrías a los sevillistas durante los últimos años. El problema será, si se le puede llamar así, la decisión que tenga que tomar Emery si avanza como acostumbra en Europa y se está jugando una plaza en Champions. Para eso queda mucho, pero hace bien Emery en ir rotando a sus jugadores para tenerlos a todos al máximo nivel competitivo.
Valencia y Sevilla han comenzado la liga muy bien, con buenos resultados y buen juego, pero colocarlos cómo posibles candidatos al título puede ser un poco aventurado. Hay que recordar, que el campeón del año pasado, el Atlético de Madrid, obró un auténtico milagro para poder llevarse la Liga ante los dos transatlánticos del campeonato. Bien es cierto, que Barcelona y Real Madrid no estuvieron a su mejor nivel el año pasado, y muy extraño sería que se permitieran no pelear la Liga de este año. Puede que Valencia y Sevilla den guerra a los tres en sus enfrentamientos, pero aguantarles el ritmo durante treinta y ocho jornadas es muy difícil. Lo que si que está claro, es que si siguen en está línea, serán los dos equipos que peleen por la cuarta posición de Champions, ya que Real Sociedad y Athetic parece que no entrarán en el combate este año, y el Villareal está un escalón por debajo de ellos. Queda mucha Liga, pero de momento el aficionado ché y sevillista tiene derecho a soñar. Ojalá que aguanten el ritmo hasta el final, porque eso nos depararía un campeonato mucho más competido y entretenido. Esperemos que sí, pero parece difícil.
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