El Celta gana a los puntos, pero no consigue el K.O
Arrancaba el partido con sorpresa, ya que por primera vez en la era Luis Enrique, Oubiña se quedaba fuera del once inicial. El asturiano, apostaba por un once netamente ofensivo, sin un centrocampista defensivo claro, dejando a Krohn-Dehli en la posición del capitán. Por parte del Athletic, Valverde sacaba su once de gala, salvo la posición de lateral derecho que volvía a ocupar De Marcos en lugar de Iraola.
Empezó el partido el conjunto celeste, mostrando lo que sería toda la primera parte. Durante los dos primeros minutos, la presión del equipo vigués fue tan intensa que el Athletic se vio obligado a despejar el peligro con sendos pelotazos. El atrevido once de Luis Enrique, el cual a simple vista era más un equipo de elaboración que de presión, sorprendió al Athletic con una presión brutal. En todas las jugadas en las que los de Valverde querían sacar el balón jugado, Gorka se veía obligado a dar un pelotazo para buscar a Aduriz. La presión de Álex López y Charles a los centrales, acompañados por el resto del equipo, cerraban cualquier vía de pase para los rojiblancos que no fuera el balón largo. Esto propiciaba rápidas recuperaciones de los celestes, que cuando recuperaban comenzaban a tocar gracias a un inspirado Rafinha. El mediapunta celeste, cuajó en la primera parte, una de su mejores actuaciones desde que llegó al Celta. Allá donde estuviera el balón, aparecía Rafinha, ya fuera para tocarlo o para ofrecerse. Parece que por fin, el fichaje estrella celeste, ha encontrado su mejor versión física y eso el equipo lo agradece. En una primera parte para enmarcar, el 12 celeste estuvo muy bien acompañado por un gran Krohn-Dehli, que ocupó perfectamente su nueva posición. Por delante, Orellana, Mina y Álex se movían para buscar los pases de Rafinha. El Athletic, se veía desbordado ante la presión del Celta y solo creaba peligro a balón parado.
La primer ocasión clara del Celta, no se hizo esperar. Un cambio de banda para Santi Mina, terminaba con la volea del canterano que se iba fuera por poco. Pero una de las grandes ocasiones de la primera parte, fue una gran combinación de los celestes que terminó con centro de Jonny al área. Allí esperaba el omnipresente Rafinha, que intentaba ajustar al máximo el balón, pero se encontraba con un soberbio Gorka que repelía el tiro a córner. El Athletic intentaba sacar petroleo de las jugadas a balón parado, pero un Celta bien colocado no pasaba demasiados apuros cómo en otras ocasiones. El Celta seguía con su gran presión, y no dejaba pensar al Athletic. Pasaban los minutos, y llegaban las dos ocasiones más claras de la primera parte. La primera, un gran tiro de Charles que se topaba con el palo izquierdo de la meta de Iraizoz. La segunda, en la misma jugada, terminaba con un tiro de Rafinha que se iba por poco fuera tras tocar en Rico. Llegaba el descanso, y el Athletic se iba al vestuario con la sensación de no haber entrado en juego y con sus dos medio centros con tarjeta amarilla.
La segunda parte nos mostraba a un Athletic más adelantado, con más intención de ir a por el partido. La presión del Celta menguaba, y ya no era tan intensa cómo en la primera parte. Luis Enrique ya preparaba cambios, ya que el guión de la primera mitad le había ido muy bien y no quería cambiarlo. Mina, dejaba el campo para que Augusto ocupara su posición. De esta forma, Rafinha quedaba más desahogado a la hora de poder irse para arriba. Sin embargo, el bajón físico también lo acusó el talento del Celta, al que la segunda parte se le hizo larga. Con la bajada en la presión celeste, Ander, Susaeta y Muniain comenzaron a aparecer. Sin embargo, Gorka seguía colgando balones a un Aduriz que comenzaba a desesperarse. El ritmo del partido bajó, y Luis Enrique daba entrada a Nolito para ganar dinamismo. Por su parte, Valverde movía también el banquillo, y daba entrada a Sola por un cansado Aduriz. El Athletic se venía arriba, pero el Celta no cejaba en su empeño de llegar al área de Iraizoz. Un cansado Rafinha, acusaba el paso de los minutos y la creatividad celeste iba desapareciendo.
Los minutos pasaban y nada cambiaba, el Athletic se venía arriba con la entrada de Ibai y gozaba de sus mejores ocasiones. El propio Ibai, disparaba fuera en la mejor ocasión del Athletic en el partido. Minutos después, una internada del extremo rojiblanco, culminaba con un mal centro del mismo al que no llegaba Muniain. En un cambio pieza por pieza, Luis Enrique daba entrada a Bermejo por Charles. El partido moría, y parecía que las tablas serían el resultado final. Sin embargo, en una valiente acción de Jonny, que cuajó un gran partido, llegaba la ocasión final. El centro del canterano celeste, terminaba en la cabeza de Bermejo, que remataba de cabeza fuera por encima de Gorka. Del Cerro Grande pitaba el final, y el reparto de puntos satisfacía a ambos equipos.
Partido vibrante, en el que el Celta mereció algo más, sobre todo en la primera parte. La gran presión de los de Luis Enrique, hizo que los de Valverde se vieran superados durante la primera parte. Con el bajón físico, el Athletic se asentó y la balanza se equilibró. El Celta, suma un punto en una jornada difícil tras las victorias de sus adversarios por la permanencia. El Athletic con el punto de hoy, mantiene su merecida cuarta plaza, aunque hoy no hubiera pasado nada si no se llevara ningún punto a Bilbao. Gran partido en Balaidos, que nos demuestra que a veces los goles no son necesarios para ver un gran espectáculo.
Empezó el partido el conjunto celeste, mostrando lo que sería toda la primera parte. Durante los dos primeros minutos, la presión del equipo vigués fue tan intensa que el Athletic se vio obligado a despejar el peligro con sendos pelotazos. El atrevido once de Luis Enrique, el cual a simple vista era más un equipo de elaboración que de presión, sorprendió al Athletic con una presión brutal. En todas las jugadas en las que los de Valverde querían sacar el balón jugado, Gorka se veía obligado a dar un pelotazo para buscar a Aduriz. La presión de Álex López y Charles a los centrales, acompañados por el resto del equipo, cerraban cualquier vía de pase para los rojiblancos que no fuera el balón largo. Esto propiciaba rápidas recuperaciones de los celestes, que cuando recuperaban comenzaban a tocar gracias a un inspirado Rafinha. El mediapunta celeste, cuajó en la primera parte, una de su mejores actuaciones desde que llegó al Celta. Allá donde estuviera el balón, aparecía Rafinha, ya fuera para tocarlo o para ofrecerse. Parece que por fin, el fichaje estrella celeste, ha encontrado su mejor versión física y eso el equipo lo agradece. En una primera parte para enmarcar, el 12 celeste estuvo muy bien acompañado por un gran Krohn-Dehli, que ocupó perfectamente su nueva posición. Por delante, Orellana, Mina y Álex se movían para buscar los pases de Rafinha. El Athletic, se veía desbordado ante la presión del Celta y solo creaba peligro a balón parado.
La primer ocasión clara del Celta, no se hizo esperar. Un cambio de banda para Santi Mina, terminaba con la volea del canterano que se iba fuera por poco. Pero una de las grandes ocasiones de la primera parte, fue una gran combinación de los celestes que terminó con centro de Jonny al área. Allí esperaba el omnipresente Rafinha, que intentaba ajustar al máximo el balón, pero se encontraba con un soberbio Gorka que repelía el tiro a córner. El Athletic intentaba sacar petroleo de las jugadas a balón parado, pero un Celta bien colocado no pasaba demasiados apuros cómo en otras ocasiones. El Celta seguía con su gran presión, y no dejaba pensar al Athletic. Pasaban los minutos, y llegaban las dos ocasiones más claras de la primera parte. La primera, un gran tiro de Charles que se topaba con el palo izquierdo de la meta de Iraizoz. La segunda, en la misma jugada, terminaba con un tiro de Rafinha que se iba por poco fuera tras tocar en Rico. Llegaba el descanso, y el Athletic se iba al vestuario con la sensación de no haber entrado en juego y con sus dos medio centros con tarjeta amarilla.
La segunda parte nos mostraba a un Athletic más adelantado, con más intención de ir a por el partido. La presión del Celta menguaba, y ya no era tan intensa cómo en la primera parte. Luis Enrique ya preparaba cambios, ya que el guión de la primera mitad le había ido muy bien y no quería cambiarlo. Mina, dejaba el campo para que Augusto ocupara su posición. De esta forma, Rafinha quedaba más desahogado a la hora de poder irse para arriba. Sin embargo, el bajón físico también lo acusó el talento del Celta, al que la segunda parte se le hizo larga. Con la bajada en la presión celeste, Ander, Susaeta y Muniain comenzaron a aparecer. Sin embargo, Gorka seguía colgando balones a un Aduriz que comenzaba a desesperarse. El ritmo del partido bajó, y Luis Enrique daba entrada a Nolito para ganar dinamismo. Por su parte, Valverde movía también el banquillo, y daba entrada a Sola por un cansado Aduriz. El Athletic se venía arriba, pero el Celta no cejaba en su empeño de llegar al área de Iraizoz. Un cansado Rafinha, acusaba el paso de los minutos y la creatividad celeste iba desapareciendo.
Los minutos pasaban y nada cambiaba, el Athletic se venía arriba con la entrada de Ibai y gozaba de sus mejores ocasiones. El propio Ibai, disparaba fuera en la mejor ocasión del Athletic en el partido. Minutos después, una internada del extremo rojiblanco, culminaba con un mal centro del mismo al que no llegaba Muniain. En un cambio pieza por pieza, Luis Enrique daba entrada a Bermejo por Charles. El partido moría, y parecía que las tablas serían el resultado final. Sin embargo, en una valiente acción de Jonny, que cuajó un gran partido, llegaba la ocasión final. El centro del canterano celeste, terminaba en la cabeza de Bermejo, que remataba de cabeza fuera por encima de Gorka. Del Cerro Grande pitaba el final, y el reparto de puntos satisfacía a ambos equipos.
Partido vibrante, en el que el Celta mereció algo más, sobre todo en la primera parte. La gran presión de los de Luis Enrique, hizo que los de Valverde se vieran superados durante la primera parte. Con el bajón físico, el Athletic se asentó y la balanza se equilibró. El Celta, suma un punto en una jornada difícil tras las victorias de sus adversarios por la permanencia. El Athletic con el punto de hoy, mantiene su merecida cuarta plaza, aunque hoy no hubiera pasado nada si no se llevara ningún punto a Bilbao. Gran partido en Balaidos, que nos demuestra que a veces los goles no son necesarios para ver un gran espectáculo.
Comentarios
Publicar un comentario