Messi hace respirar al Camp Nou

 Con un planteamiento muy diferente al de la ida, el Manchester City se presentó en el Camp Nou con la intención de pescar algo. Tras el partido de Valladolid, el Barça necesitaba reivindicarse con un buen partido ante su público. Sin embargo, el gol de Messi con la colaboración de Lescott, dio el pase a los azulgrana a los cuartos de final. El gol de Kompany casi al final, no sirvió más que para espolear al equipo inglés, que terminó recibiendo el segundo de manos de Alves.


 El City salía con la intención de meter el miedo en el cuerpo al Barça, incluso llegando a quitarle el balón durante algunos minutos. Sin embargo, el dominio citizen no se traducía en ocasiones. El Barça, que salió con todas sus estrellas, dejando en el banquillo a Alexis y Pedro, intentaba hacerse con el balón pero le costaba demasiado. Cómo curiosidad, y para los que no se hayan fijado en el detalle. Durante la primera parte, cuando el City sacaba el balón, Busquets acompañaba a Touré hasta más allá de la medular para que no pudiera crear. El City cambiaba de cara con respecto al partido de ida, y con Silva mucho más suelto, daba más sensación de peligro que el Etihad. Da la impresión, que de no ser tan conservador en la ida, los citizens podrían haber sacado más rédito a la eliminatoria. El Barça, con su once de gala, pecó de algunos de los pecados del partido de Valladolid. Falta de movilidad, fallos defensivos y un Neymar desaparecido que prácticamente no entró en juego. 

 El City, que jugó con diez casi toda la primera parte, ya que Agüero estuvo lesionado desde el comienzo del partido y no fue cambiado, fue incapaz de llevar peligro a la meta de Valdés. El primer tiro a puerta del partido, se produjo pasada ya la media hora por parte del Barça. Messi, el mejor del partido y de los culés, estuvo más participativo que en los últimos encuentros. El argentino, junto a Iniesta, fue de los más activos durante la primera parte. Milner tapaba a Alves, y eso hacía que la única banda activa fuera la de Alba, que no era tan perseguido por Nasri. Cesc, Busquets, Xavi e Iniesta combinaban entre ellos, pero perdían el balón en demasiadas ocasiones. La jugada más clara del City fue una combinación entre Touré, Silva y Nasri. El canario, dejaba el balón de tacón a Nasri que remataba a las manos de Valdés. La primera parte llegaba a su fin, y no parecía que el partido fuera a caer de ninguno de los dos bandos. El Barça llegó con más peligro, e incluso le fue anulado un gol legal, pero no parecía decidido a ir a por el partido. 

 Comenzaba la segunda parte, y el City dejaba en el banquillo al Kun para que entrara Dzeko. El bosnio dio problemas a Piqué desde el primer minuto, ya que bajaba a recibir para asistir a las bandas. De esta forma, los balones largos de los citizens eran más aprovechados que con el Kun. Silva comenzó a combinar con Nasri y Milner, y pronto llegó el peligro. En un centro al área, Dzeko ganaba la partida a su marcador y hacía volar a Valdés. El de Hospitalet, en la parada del partido, volaba a la escuadra izquierda para evitar el primero del City. El año que viene, se echará mucho de menos al guardameta catalán en Can Barça. Minutos después, un tiro de Zabaleta se iba fuera y levantaba las primeras alertas entre el público culé. Sin embargo, y cómo siempre, Messi acudía al rescate. El argentino, que ya había avisado enviando un tiro al palo, además de otro que se iba por poco desde la frontal. Minutos después y tras un fallo defensivo de Lescott, que no acertaba a despejar, dejaba el balón franco al diez para que definiera cómo los ángeles ante Hart. Con la calidad con la que nos tiene acostumbrados, Leo picaba el balón y enviaba el balón a las mallas. A partir de ahí ya no hubo partido, solo un posible penalty de Piqué sobre Dzeko que terminaba con la expulsión de Zabaleta por protestar. Luego vendría el intrascendente gol de Kompany, a la salida de un córner y que dejaba en evidencia de nuevo a la defensa culé. En los minutos finales, el City se volcó y recibió el segundo. El gol venía tras una genialidad de Iniesta, que tras regatear a Hart, dejaba el balón a Alves para que pusiera el segundo. 

 Eliminatoria superada para el Barça, pero al que le esperará en cuartos algún hueso duro de roer. PSG, Atleti, Real Madrid, Chelsea, Bayern o Dortmund y el ganador de la eliminatoria entre Manchester y Olympiacos. Si el Barça no mejora, puede que la próxima sea su última eliminatoria de Champions. Debe mejorar el ritmo, la movilidad, y sobre todo los errores defensivos cómo el de hoy en el córner. No siempre estará Valdés para salvar los muebles, y los rivales que vienen no son moco de pavo. Ahora a esperar al sorteo. Veremos. 

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