Resumen Real Madrid-Juventus y resto jornada Champions

  Tras ver el resultado, el aficionado madridista, es lo mejor que se puede llevar a casa, ya que la mejoría mostrada contra el Málaga, se ha visto diluida cual azucarillo en el partido de hoy ante la Juve.

  El equipo de Ancelotti, saltó al Bernabéu con la misión de vencer, y convencer a su público. En los primeros minutos, los blancos, con el ardor inicial de las grandes citas en el Coliseo blanco, mantuvieron un ritmo y una presión que duró hasta el gol de Cristiano. De nuevo un superlativo Di María, se inventó un pase genial, que el portugués envío a la red tras regatear a Buffon. Pero ahí terminó el partido blanco, y es que tras el gol, el planteamiento de salida de los de Conte, comenzó a fructificar. El técnico italiano, dejó a Llorente cómo referencia en ataque, manteniendo ocupados a Ramos y Pepe con él. Pero lo que más daño hizo a los blancos, fueron las posiciones de Tévez, Marchisio, Pogba, Vidal y Pirlo. Tanto Tévez, como Marchisio no tenían posición fija. y esto hacía que tanto Arbeloa, cómo Marcelo, no supieran a quién marcar cuando la Juve atacaba. Esto unido, a la nula presión que el Real Madrid ejercía sobre Pirlo, ya que Illarra marcaba a Vidal, Modric hacía la cobertura a las subidas de Marcelo y Khedira intentaba controlar a Pogba, hacía que el juego italiano se jugara al ritmo que marcaba Pirlo. El problema, es que ni Benzema, ni Cristiano, presionaban la salida de balón juventina, y un balón a la espalda de Marcelo, terminaba conun centro al área y el remate de Pogba, sólo, ya que Arbeloa había perdido su marca, y que tras la parada de Casillas, Llorente enviaba a la red. El inocente, y claro penalty de Chielini, ponía de nuevo por delante a los blancos, ya que Cristiano anotaba su segundo gol desde el punto de penalty, pero el guión del partido seguía siendo el mismo.

  Tras la reanudación, la tempranera, y exagerada expulsión de Chielini, al que su fama de duro le jugó una mala pasada, ponía si cabe más de cara el partido para los de Concha Espina, pero el efecto fue todo lo contrario. El equipo blanco, pareció entrar en una especie de letargo, y una Juventus con diez, movía el balón a su antojo. Conte tuvo que mover ficha y retiró a Llorente, para no dejar desguarnecida su defensa tras la expulsión de Chielini, y lo que tenía que ser un desahogo para la defensa blanca, se convirtió en un nuevo quebradero de cabeza. Al no haber referencia atacante, Ramos y Pepe esperaban las acometidas italianas, pero ni Arbeloa, ni Marcelo, tenían claro ya a quién tenían que marcar. Conte retiró a Pirlo, que se llevó la merecida ovación del Bernabéu, y es que en los sesenta minutos largos que jugó, dio un auténtico clinic a Illarra, Modric y Khedira. Bien es cierto, que todo fueron facilidades para el medio centro italiano, pero la clase, y la visión de juego de este jugador, comenzaran a echarse de menos el día que se vaya, mientras tanto, podemos seguir disfrutando de él. Con la entrada de Giovinco en la banda de Arbeloa, la defensa madridista comenzó a verse en aprietos, ya que la movilidad del menudo y talentoso jugador italiano, volvía loco a un Arbeloa que no sabía hasta que punto tenía que seguirlo. Ancelotti retiró a Benzema, tras fallar una ocasión clarísima, en una muestra más de que la presión está pudiendo con el francés, para dar entrada a un Bale que tocó el balón dos veces en todo el partido. El siguiente cambio, fue dar entrada a Isco por Illarra, ya que necesitaba recuperar el dominio del balón, que un rival con diez le estaba discutiendo. Pero el del Arroyo de la Miel estuvo fuera del partido, y es que Isco no es el mismo que a principio de temporada, y todo apunta a que será suplente en el Clásico.

  El partido moría y Carlo decidió dar minutos a Morata, además de descanso a Di María, pero el conjunto blanco no terminaba de hacerse con el balón ni con el partido. La Juve no terminaba de llevar peligro, pero el aficionado blanco, tenía la mosca detrás de la oreja ante la caraja madridista. Lo mejor del partido para los de Chamartín, fue cuando el árbitro alemán pito el final. Tres puntos que le dan casi la clasificación matemática y que le dan tranquilidad hasta el sábado, pero tiene muchas cosas que mejorar, sino quiere salir escaldado de su visita a la Ciudad Condal. Tiene que mejorar la presión, la solidaridad entre líneas y sobre todo la fluidez de balón, y es que cuando Khedira y Arbeloa se juntan en el costado derecho, parece que se apagan las luces del estadio. Analizaremos el Clásico con diversos artículos hasta el sábado, pero si Ancelotti quiere sacar algo positivo del Nou Camp, debe plantearse de cual de los dos quiere prescindir.

  En el resto de partidos, se cumplió el guión esperado y no hubo grandes sorpresas. En el grupo del Madrid, el Galatasaray se impuso con comodidad al Copenhague, y toma ventaja a la Juventus en la pelea por la segunda plaza. Cabe recordar que los turcos, consiguieron llevarse un empate de Turín y tienen que recibir a la Vecchia Signora en Estambul, y la Juve conocerá el infierno turco en su máximo exponente.

  La nota negativa de la jornada, fue la derrota de la Real Sociedad en Old Trafford, a la que el tempranero gol en propia puerta de Iñigo Martínez condenó durante el resto del partido. Bien es cierto, que los donostiarras, estrellaron dos balones en el palo, pero el Manchester, sin estar a su mejor nivel, sigue siendo mucho Manchester y más en casa. La Real parece que ve como se le escapa su sueño, ya que en el otro partido del grupo, la victoria del Leverkussen en casa ante el Shaktar, deja muy difícil la clasificación para los vascos, tanto para los octavos de final, cómo para la Europa League.

 En el resto de partidos, no hubo sorpresas. La sufrida victoria del Manchester City en Moscú, en un partido en el que luchó contra los elementos y contra el CSKA, pero que solventó con dos goles de Agüero, obligaban al Bayern Munich a ganar al débil Viktoria Pilsen en casa para mantener el liderato. Pero los muniqueses no sólo gananron, sino que golearon por 5-0 a la cenicienta del grupo. A falta de tres jornadas, podemos afirmar que este grupo, salvo clamorosa sorpresa, ya tiene a sus dos clasificados y con el orden definido.

  En el grupo del PSG y el Benfica, la gran sorpresa se produjo en Lisboa, donde en un partido que más bien parecía waterpolo que fútbol, y que Undiano tenía que haber suspendido al descanso, el Olympiacos arrancó un punto en su visita a Da Luz que le hace soñar con el pase a la siguiente ronda. Mientras tanto, en Bélgica, Zlatan Ibrahimovic, se daba un festín en el 0-5 que el PSG endosaba al Anderletch, ya que el sueco marcó cuatro de los cinco goles parisinos. Especial mención merece el gol que Zlatan marca desde fuera del área, un balón que engancha a bote pronto desde casi treinta y cinco metros y que cuela por toda la escuadra del meta belga, que no pudo más que aplaudir. El sueco se encuentra en estado de gracia, y yo no descartaría al PSG como candidato al título continental de este año si los grandes de Europa se despistan. 

  La jornada Champions se cierra con la victoria sin brillo del Real Madrid ante la Juve, y con la impresión de que el sábado nos espera un partido más abierto de lo que esperábamos meses atrás. A partir de mañana, dedicaremos un artículo a cada línea de los dos equipos y un artículo especial a sus entrenadores y al posible planteamiento de ambos. De lo que estamos seguros, es que el sábado veremos un gran espectáculo, y viendo como defienden ambos, puede que muchos goles. Veremos...