Partido a partido

 La vuelta del partido de Copa de hoy en el Calderón, no era un partido de trámite para los de Simeone. El entrenador rojiblanco, reservó a muy poca artillería consciente de lo que se jugaba. En el otro lado, Pizzi, tampoco daba la eliminatoria por concluida. Esto nos deparó un partido competido, que solo pudo decidirse a balón parado.

 Parece que la política del Cholo, partido a partido, ha calado entre sus jugadores. Con pocas novedades respecto al once que se enfrentó al Barça, Villa y Koke descansaron, el Atlético saltaba al césped del Calderón con la intención de solventar la eliminatoria. Sin embargo, el equipo rojiblanco, se encontró con un equipo enfrente que no tenía pensado tirar la Copa. El conjunto ché, que con un gol se metía en la eliminatoria, no puso fácil la clasificación a los colchoneros. La principal novedad del once de Simeone, era el debut del argentino Sosa. Además, el Cholo ponía en el campo a su segundo máximo goleador de la plantilla, Raúl García. En el planteamiento del argentino, Diego Costa quedaba cómo referencia, con el cuarteto de centrocampistas por detrás de él. Arda, hacía la función de enganche, pero el talento del turco no pudo salir gracias a la gran labor del centro del campo valencianista. Javi Fuego, Parejo y Michel frenaban el movimiento de balón colchonero. Feghouli y Fede quedaban cómo enganches con Postiga, y el argentino fue el que más peligro llevó durante la primera parte. 

 El partido no parecía tener un claro dominador, el Valencia se conformaba con el resultado y con que el Atlético no le creara peligro. Los chés, esperaban una jugada a balón parado o una genialidad de su trío atacante para agarrarse a la eliminatoria. El planteamiento de Pizzi, chocaba directamente con el de Simeone. El técnico rojiblanco, era consciente de que tenía la eliminatoria ganada, pero también de que un gol metía al Valencia en ella. Por eso, el Atlético tampoco se obcecó en conseguir el primero. Esta situación, en la que ninguno de los dos quería arriesgar, nos mostró una primera parte sin historia y sin peligro alguno. Alguna incursión de Diego Costa, y un Sosa empeñado en dar el balón a la primera al hispano-brasileño, fueron el mayor peligro atlético. Por parte valencianista, alguna jugada a balón parado y poco más. El miedo a recibir un gol, atenazaba a los dos equipos y la primera parte llegaba a su fin. 

 Tras el descanso, el guión del partido fue prácticamente el mismo. Sin embargo, tras una serie de córners mal sacados por Sosa, en los cuales el argentino siempre se quedaba corto, hacían que Gabi se encargara de los mismos. En un lanzamiento desde la esquina derecha de la defensa valencianista, el capitán atlético colgaba el balón. Al igual que en la ida, Guaita volvió a fallar en su salida, y el balón fue a parar a Godín que cabeceó a la red ante la mirada de un confiado Barragán. A partir de ahí, el partido fue otro. El Atlético, se limitó a esperar al Valencia para cazar una contra. Pizzi dio entrada a Piatti y Pabón para intentar el empate, e incluso gozó de alguna ocasión, pero el gol no llegaba. Por momentos, el Atlético parecía encerrado en su área, pero el peligro no llegó a ser real. El Valencia lo intentaba, pero en una nueva jugada a balón parado, Raúl García sentenciaba la eliminatoria y el partido. Luego vendría la expulsión de Parejo, y el partido terminaba con el 2-0 que mostraba el electrónico del Vicente Calderón. 

 En uno de sus partidos menos brillantes, y sin ningún alarde, el Atlético se llevó el partido. Probablemente, en otra época, el Atlético se hubiera quedado fuera. Sin embargo, este año parece que todo le viene de cara al equipo de Simeone. La filosofía de ir partido a partido, parece que funciona, así que no creo que vaya a cambiarla. De todas formas, uno ya no se cree que de puertas para adentro, la plantilla atlética y su cuerpo técnico no se vean candidatos a todo. Nos quedaremos con la versión oficial, que es la que nos da Simeone en cada rueda de prensa. Esa filosofía, que ha llevado al equipo hasta aquí, es la de ganar en la calle, al ping pong, al fútbol sala, a las canicas, al tute, a todo... Al fin y al cabo, ya lo decía Luis Aragonés, ganar, ganar y ganar. Y volver a ganar. Partido a partido...